El cine de Andy Warhol

Andy Warhol al desnudo es una de las muestras exclusivas que se estarán exhibiendo como parte del Festival de Cine de Verano y que el Multicine Infanta tendrá el privilegio de presentar entre los días 14 y el 20 del presente mes, en la Sala 3 de dicha instalación.

El ciclo lo compone una selección de filmes producidos por The Factory, uno de los primeros laboratorios de arte o art-labs creado por el rey del pop art, Andy Warhol. The Factory era una sede multidisciplinaria que funcionaba como centro de arte, discoteca a tiempo completo, estudio de cine y fotografía. Era conocida por sus escandalosas fiestas, además de ser frecuentada por personajes con pretensiones artísticas y bohemios excéntricos. Entre ellos, Warhol elegía a las llamadas “Warhol Superstars”, a las que promocionaba durante cierto tiempo hasta que escogía a sus sustitutas, llevando así a la práctica su famosa frase que aseguraba que “todo el mundo tendría sus quince minutos de fama”.

Debido al interés de Warhol por el cine, The Factory creó una productora que llegó a tener sus peculiares estrellas como el sex symbol gay Joe Dallesandro, o el transexual Candy Carline, que crearon el sello de la empresa. Títulos como Yo, un hombre, Vinyl, Basura, Women in Revolt, My Hustler y Sangre para Drácula, producidos por Warhol y dirigidas en su mayoría por su socio Paul Morrissey, componen este ciclo. Estas cintas se caracterizan por el fuerte aire de improvisación, en las que poner un carrete, encender la cámara e irse a hablar por teléfono hasta que se acabara el rollo, era lo más común. El montaje radicaba en unir los rollos dejando una tira en blanco entre cada uno. Sin guion, la historia a contar no era más que una situación que Warhol dejaba en manos de sus actores (no actores), quienes poseían una asombrosa facultad para la improvisación, creando un nuevo tipo de comedia que, sin dejar de ser la más pura expresión del underground, también es una nueva variante de la tradicional comedia norteamericana.

A pesar de poseer alto contenido sexual, estas películas enfocan el tema como algo casual a lo que no se concede mayor importancia y, aunque aparentemente parezcan inmorales, en el fondo son profundamente moralizantes. Están construidas sobre largas escenas, con gran abundancia de diálogos, donde rostros y voces desconocidos  encuentran el campo abierto a la experimentación dentro de estructuras clásicas. Son filmes irregulares, desmesurados, elípticos, cuyo carácter transgresor lo definió como un cine contracultural a tono con las corrientes artísticas de moda en los años 60.

(14-20/ 07/ 2016)

Tomado de: Cartelera Cine y Video.