El hombre de Maisinicú. Entrevista a Sergio Corrieri

Sergio Corrieri, 34 años, director del Grupo Teatro Escambray, actor de cine y de teatro, protagonista de El hombre de Maisinicú, afirma que la experiencia de cuatro años de trabajo en la montañosa región de Las Villas fue un factor importante para su personificación de Alberto Delgado, héroe del filme.

“Indudablemente que esta experiencia directa, expresa, y todo lo que ha significado nuestra llegada aquí al Escambray, la lucha contra bandidos, y lo que ella representa, se ha ido incorporando durante estos años a nuestro sentimiento y cultura. Tanto es así que ha dado lugar a dos obras de teatro, producidas en el Grupo, con respecto a esta problemática de los bandidos”.

Corrieri, a quien entrevistamos en el campamento del Grupo Teatro Escambray —en la Macagua—, destaca que la ayuda de Manuel Pérez, director de la película, fue extraordinaria y decisiva: “me brindó una confianza absoluta, él sabía muy bien lo que quería de este personaje, y cómo conducirlo, hasta donde él lo necesitaba”.

“En el caso de Alberto —explica Corrieri—, tanto la dirección como yo seguimos un criterio: no se trataba de reproducir a Alberto físicamente, puesto que eso era imposible. Durante toda la filmación en Trinidad y en el Escambray, muchos compañeros que lo conocieron se acercaban a nosotros y nos decían: Alberto tenía la voz ronca, usaba el sombrero así, se ponía una sola espuela en el pie izquierdo, montaba el caballo así...”

Aclara Sergio que tomar en cuenta tales detalles “representaba correr el riesgo de preocuparse demasiado por ellos y olvidarse de lo principal: la personalidad de Alberto, qué clase de hombre era, cómo reaccionaba y enfrentaba las situaciones”.

Junto al riguroso guion de Pérez, también contribuyeron decisivamente “las múltiples conversaciones que sostuvimos con compañeros del MININT, con gente que lo conocía, que nos hablaban de Alberto en el sentido que nos interesaba; es decir, su manera de ser, su forma de reaccionar”.

“Yo creo que en el caso mío esta experiencia de cuatro años, de la vivencia directa de esta realidad que se construye —limitada en mi caso al regional Escambray, pero que es la misma de toda Cuba—, también ha sido decisiva para la construcción de este personaje.”

La última escena

Pregunto a Corrieri cuál fue el momento más difícil de la filmación de El hombre de Maisinicú. Responde que la secuencia final, la que comienza con el enfrentamiento de “Cheíto” León, y culmina con la muerte de Alberto.

Es la escena cumbre de la película, estima Corrieri, “la más compleja. Requirió cuatro noches completas de filmación en un medio abrupto, es una escena de una violencia extraordinaria. Además, había que actuar rodando por el suelo, recibir golpes, patadas, cuidar que el maquillaje no se deteriorara".

Recuerda el actor y director del Grupo Teatro Escambray que en esa escena última de El hombre de Maisinicú hubo que conjugar muchos factores para realizar la filmación. “Algunos de ellos ni siquiera dependían de la voluntad de los actores, como el humo de la hoguera, por ejemplo”.

“Lo importante de esta escena, reitera Sergio, refiriéndose a la escena final, es el enfrentamiento de Alberto y el bandido que ya sabe que está ante un infiltrado de la Seguridad, y quiere que este lo admita. Quiere jugar con Alberto, pero Alberto, aunque se sabe atrapado, aunque sabe que ya no tiene salida, no cede y, además, no se deja utilizar, no se presta al juego. Tanto es así que, en un momento determinado cuando la ambigüedad de “Cheíto” León llega a su clímax, Alberto es quien acaba por decir: “suéltala y dime claro cómo es la cosa”.

El trabajo del Grupo Teatro Escambray

Sergio confiesa su entusiasmo por esta película y el “fenómeno que ella representa dentro del cine cubano y de nuestra realidad nacional”.

Ahora habla de su trabajo como actor y director del Grupo Teatro Escambray:

“Desde hace cuatro años, excepto la pausa de tres meses para El hombre de Maisinicú, estoy absorbido y entusiasmado por la labor del grupo teatro, que se encuentra ahora en su tercera temporada”.

“Estamos culminando una gira que ya ha incluido presentaciones en cinco municipios y que ahora continuamos en otros tres, con una programación que abarca las obras estrenadas durante este año. Una de ellas se llama El juicio, y trata, a propósito, de la lucha contra bandidos, pero no enfocada en su sentido histórico, sino desde el punto de vista de las secuelas actuales de esa lucha en la vida social del Escambray”.

(…)

Tomado de Archivos de la Cinemateca.