Espejuelos oscuros: una historia muy personal

La joven realizadora cubana Jessica Rodríguez se encuentra en La Habana por estos días estrenando su ópera prima: Espejuelos oscuros (2015). Luego de la primera exhibición de la cinta en el 37 Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano (FINCL), Cubacine tuvo la oportunidad de conversar con la directora y guionista.

“Estrenamos en Cuba porque el público cubano es mi prioridad. A mí me gusta mucho este Festival, porque el público es muy extrovertido, muy participativo. Aquí no queda lugar para las dudas: es visible la opinión del público. En otros países las personas son muy reservadas con sus emociones. Estoy muy contenta, porque creo que el público quedó satisfecho”.

La coproducción cubano-española dialoga sobre momentos cruciales de la historia patria. No obstante, la guionista se aparta completamente de los discursos que todos hemos aprendido de memoria en la escuela. Desde ya alerto a los cinéfilos sobre este filme, que subvierte muchos mitos preestablecidos en el imaginario popular cubano. Espejuelos oscuros desempolva -con mucha gracia- arquetipos casi intocables, como es el caso de la mujer mambisa (para mí, el mejor cuento). Digo que alerto, porque ya se sabe que el ser humano no es muy dado a los cambios. Y eso es precisamente lo que pretende la directora: que miremos desde otro punto de vista nuestros orígenes.

“Mi intención es contar una Historia ‘otra’ de Cuba, con personajes imperfectos, con defectos, los que no salen en los libros de texto. Todos somos seres imperfectos, así que me imagino que los héroes también tendrían defectos. Decidí contar la historia de tres mujeres que no se han conformado con el lugar que la sociedad y la Historia ha guardado para ellas: las amantes esposas, las madres excepcionales. Yo quería mostrar personajes que pusieran el deseo por encima del deber; y sobre todo, que no estuvieran a la sombra de un hombre, sino que fueran las protagonistas de sus propias historias.”

Espejuelos oscuros narra una historia menos grandilocuente y personalísima del país, según la visión de esta cubana de apenas una treintena de años. Un ejemplo más de los nuevos discursos que conforman los que se ha dado en llamar el cine de los Nuevos Realizadores, aquellos relatos emergidos del cine independiente y que llegan, poco a poco, a la gran pantalla.

El guion de la cinta estuvo listo en un mes, sin embargo, el proyecto tomó siete años en concretarse. “Es muy difícil hacer cine independiente. Hay factores negativos y positivos. Tuvimos muchos problemas de producción: hicimos 24 llamados y cada día me levantaba pensando que sería el último. Por otro lado, trabajé para mí. Hice la película que quería hacer, desde el punto de vista estético y conceptual. Estoy convencida de que quiero hacer un cine honesto conmigo y mi manera de vivir. Hacer lo contrario para mí sería imposible”.

El filme transitó un largo proceso de búsqueda de financiamiento. Contó con apoyo de fondos de ayuda como Cinergia y Nuevas Miradas. Igualmente convocaron a un crowfounding o recaudación de fondos a través de Internet y el pitching Haciendo Cine, de la Muestra Joven ICAIC. “Desde la Muestra siempre nos han ayudado, especialmente su directora, Marisol Rodríguez”.

Espejuelos oscuros es la ópera prima de varios profesionales del medio. Al decir de Rodríguez, eso posibilitó “una frescura, unas ganas de demostrar que podemos trabajar. Creo que eso se nota”.

Sin embargo, para las elecciones de casting la directora optó por figuras consagradas del cine cubano como Laura de la Uz y Luis Alberto García, quienes protagonizan el filme, interpretando a varios personajes en cada una de las historias. La directora alega que al salirse de su zona de confort, el género documental, decidió apostar por lo seguro con su primer largo de ficción. 

“En una película de bajísimo presupuesto. Sabía que no podía hacer 10 tomas de cada plano, así que aposté por lo seguro. Me gustó mucho trabajar con ellos, porque además de ser buenos actores, son personas muy inteligentes que le aportaron mucho a la historia”.

En los meses venideros, el filme comenzará su recorrido por otros festivales internacionales. Por el momento solo resta dejarse seducir por este largometraje de ficción, que nos propone ver la vida desde una perspectiva diferente. Ya usted elegirá si se pone, o no, unos Espejuelos oscuros.