FIC Gibara revela su diversidad en conferencia de prensa

La conferencia de prensa ofrecida por el Comité Organizador de la edición catorce del Festival Internacional de Cine de Gibara, en el Centro Cultural Cinematográfico Fresa y Chocolate, desplegó con numerosas revelaciones, la cartografía del evento en todo su complejo y heterogéneo entramado artístico y sociocultural. Estructura plural que una vez más busca integrar todas las manifestaciones con el cine como gran eje y razón. Algunos de sus importantes representantes internacionales volverán, otros visitarán por primera vez la Villa Blanca. Pues además del puertorriqueño Benicio del Toro, se suma a la cita el también actor y director mexicano Demián Bichir, y el realizador español Félix Viscarret (director de la premiada tetralogía Cuatro estaciones en La Habana). La dedicatoria especial a la niñez y la adolescencia han motivado un amplio diseño de exhibiciones fílmicas y funciones escénicas pensados para estas edades.

La apertura a cargo del cantautor cubano Silvio Rodríguez junto al trío Trovarroco, y la clausura a manos del icono musical argentino Fito Páez, hablan, según Jorge Perugorría, Presidente del Festival, de una edición donde “no solamente hemos crecido en calidad en el tema competitivo y cinematográfico, sino también en todas las actividades interactivas que han caracterizado siempre a este Festival, desde que Humberto lo fundó. También hemos logrado crecer en músicos, en artistas visuales, bailarines, actores”. Según acotó Sergio Benvenuto —quien se desempeña este año como asesor del Presidente—, el FIC Gibara “vuelve al rigor absoluto de los foros matinales” que lo caracterizó desde sus inicios. Tales espacios, a realizarse “de lunes a viernes, van a ser muy profesionales. Habrá uno dedicado a la producción, con figuras muy importantes; otro dedicado a Memorias del Subdesarrollo (Tomás Gutiérrez Alea, 1968) y a Lucía (Humberto Solás, 1968); otro dedicado al tema del género y audiovisual en la niñez y la adolescencia; otro dedicado al patrimonio con una mirada muy amplia sobre lo que significa hoy patrimonio, sociedad, comunidad. Y volvemos a tener presentaciones en el horario de las tres y media de la tarde, dirigidas a la prensa, donde van a participar muchos de los invitados cineastas, músicos, teatristas, artistas visuales. Además de una conferencia magistral de la investigadora cubana Natalia Bolívar”.

“Con toda sinceridad podemos decir que el nivel de las selecciones que van a encontrar en el sitio web, es el mejor al que podríamos aspirar”, subrayó Benvenuto respecto a la muestra fílmica colateral y en competencia, cuyas calidades técnicas óptimas para la exhibición en el cine Jiba fueron garantizadas. “Representa un salto cualitativo. En estos tres años de camino del Festival de Cine Pobre al FIC Gibara con Perugorría, estamos ante el logro de lo que él propuso este año, cuando le pidió al equipo enfocarse en dirigirlo al cine. Hay que entender que es un evento muy rico, muy diverso, y que ocurre solo en una semana”

Diversidad cuya materialización en el evento como tal se debe, según apuntó Perugorría al inicio mismo de la conferencia,  al “apoyo del Ministerio de Cultura, del ICAIC, el Gobierno de Holguín, el Gobierno de Gibara, para poder llevar adelante al Festival este año. Para nadie es ajeno que, sobre todo las provincias del Oriente, toda la costa norte de Cuba, estuvieron seriamente afectados. Gibara está incluida, y el esfuerzo que se ha hecho para recuperarla, para tenerla lista para el Festival, ha sido muy grande. Queremos dar las gracias porque en medio de un momento tan difícil para el país haya habido la voluntad política de darle continuidad. Reconocer eso es muy importante, pues en momentos difíciles hemos tenido el apoyo para que el Festival mantenga su anualidad, para hacer un trabajo que tenga continuidad. Así podemos cumplir nuestro sueño de que el Festival crezca, y que este crecimiento acompañe a Gibara también, que está creciendo con el esplendor que ya comienza a tener como destino turístico, como ciudad mágica y encantadora. Pero que cada vez está vistiendo las mejores galas. Humberto estaría feliz si caminara hoy por Gibara. Todo lo que iba a ver… Pues gran parte se debe a esa inspiración que nos dejó”.

“Estamos muy contentos con los gibareños”, acotó el actor, director y artista visual, “pues cada vez que vamos sentimos que están esperando su festival. Trabajamos muy duro, pero eso nos da mucha ilusión. Quería agradecer de manera general a todos los patrocinadores. Quiero resaltar a algunos como Iberostar, con el cual tenemos una relación de complicidad, pues junto con el Ministerio de Turismo están trabajando por el desarrollo de Gibara como destino turístico, y nosotros estamos adscritos a ese propósito. Qué mejor manera de vender Gibara, de vender su cultura, que el Festival. En ese sentido estamos trabajando juntos. E Iberostar nos está apoyando de una manera fundamental. Por supuesto, hay otros patrocinadores que siempre están con nosotros, como Cuba Ron, Havana Club, Patrimonio: siempre teniendo en cuenta que Gibara es una ciudad patrimonial, y que el Festival también tiene ese propósito de enaltecer la arquitectura, la cultura y la historia. La lista es bastante amplia”.

Algo que igualmente destaca en esta nueva edición es su desarrollo “a diez años de la muerte de Humberto Solás, tendremos tres maneras específicas de homenajearlo”, comentó también Benvenuto,  “porque ya el Festival en sí, con sus premios Lucía y su visión de Cine en Construcción dirigida a potenciar la mejor película de cine pobre, están perennemente rememorándolo. Habrá una exposición titulada Humberto Solás: un deseo, un camino, curada por Alicia García, en el cine Jiba, que integra la muestra Imágenes de vida, que ya se realizó con el diseñador Nelson Ponce, con las aproximaciones de otra diseñadora que trabaja una versión más contemporánea enfocada en el Festival de Cine Pobre, y en la etapa de las cintas Miel para Oshún (2001) y Barrio Cuba (2005). Humberto y Titón van a estar presentes de manera muy especial en el ámbito de los foros teóricos” y en la proyección de dos versiones restauradas de Memorias… y Lucía, presentadas mundialmente en la sección Cannes Classic del importante festival francés.

Para Benvenuto, otro tributo a Solás es que “la mirada del FIC Gibara sigue siendo muy cercana a la del Cine Pobre desde las perspectivas que enfoca en todo momento: el cine, las artes y el objetivo comunitario de desarrollo local. La particularidad es que hoy estamos viendo un desarrollo local en Gibara que Humberto soñó, y que cuando en 2000 andábamos filmando Miel para Oshún juntos lo veíamos como una quimera. Hoy existe una Gibara con niveles de solidez enormes. Hay hoteles. Hay una capacidad de gestar. Hay dos eventos colaterales gibareños completamente gestionados por ellos: el evento de la niñez, con el apoyo de la UNIAL, y el culinario, que este año está con nosotros y el año que viene se separa, porque es un ejemplo de evento completamente autogestionado. En el mundo de los festivales hoy el tema de los eventos culinarios es importante, como en Berlín y otros de primera línea. Nosotros no vamos a dejar que este se separe completamente, pues nos prestigia”.

En cuestión de homenajes a personalidades cardinales del Séptimo Arte en Cuba, Jorge Perugorría anunció que el premio “Lucía de Honor que se entrega por segunda vez este año, lo concederemos a Enrique Pineda Barnet, realizador cubano al que los cineastas adoramos. Alguien de culto. Una figura de relevancia como creador, y de inspiración para los jóvenes que quieren y hacen cine. Vamos a hacer todo lo posible porque Enriquito esté con nosotros allá. También le vamos a entregar el premio a esa gran actriz emblemática del cine cubano que es Mirta Ibarra, musa de grandes directores como Tomás Gutiérrez Alea. Y a ese gran actor, Salvador Wood, que para mí es un referente, una figura también emblemática. Desde que quise hacer cine, Salvador era para mí un ícono, un ejemplo de actor, y creo que es muy merecida esta Lucía de Honor a toda su carrera. Tengo siempre en blanco y negro a Salvador en mi cabeza, como parte de esos recuerdos de la que fue la etapa más bonita del cine cubano”.

Otros dos importantes tributos fílmicos tendrán lugar en Gibara: la proyección de una versión restaurada de El lado oscuro del corazón (Eliseo Subiela, 1992), cuyo compositor de la banda sonora, el argentino Osvaldo Montes —integrante del jurado de ficción—, complementará con un concierto especial junto a la iglesia de la ciudad. Y la celebración con la presencia de Benicio del Toro de los veinte años de estrenada la cinta Fear and Loathing in Las Vegas (Miedo y asco en Las Vegas) de Terry Gilliam, protagonizado por Johnny Depp y Del Toro.

Entre las muchas novedades, fueron anunciados los respectivos jurados oficiales, presididos por Viscarret (Largo y cortometraje de ficción), la realizadora estadounidense Laurie Ann Schag (Largo y corto documental, Animación y Videoarte), el productor y cineasta británico Stephen Bayly (Cine en construcción y guion inédito) y el escritor y ensayista cubano Rafael Grillo (Premio de la Prensa), cuyas nóminas completa aparecen en el sitio web. También se abundó sobre los amplios programas de música, por parte de la coordinadora Amalia Rojas, y los de artes escénicas y artes visuales, por parte de René de la Cruz (hijo), director artístico del Festival.

A la voz prologar de Silvio, y la epilogar de Páez, se suman al FIC Gibara 2018 el clásico vivo que es Síntesis, y la banda de rock Zeus, que celebrará su treinta años de fundada. También Kelvis Ochoa, David Torrens, Athanai Castro, Cimafunk, Haydée Milanés, Pancho Céspedes, Polito Ibañez, Raúl Paz y el grupo Nube Roja. Sus actuaciones en el escenario melódico principal, alternarán con dos espacios más, especializados respectivamente en música electrónica y jazz, con la presencia de Roberto Fonseca, Oliver Valdés, y el grupo Ceda el paso. Tal catálogo, en opinión del fundador Sergio Benvenuto, hace que el apartado musical del evento “en este 2018 llegue a su tope. Pues el Festival de Cine Pobre se planteó siempre cambiar los gustos musicales en esta zona del país, y lo logró. Que el FIC Gibara consiga tener un evento más grande de lo que habla es del potencial cultural que se lleva a Gibara, pues todos regalan su arte”.

Trece exposiciones tendrán sede simultáneamente en Gibara durante los días de Festival, entre las que se hallan una muestra homenaje al pintor Cosme Proenza, la propuesta Pupila de Diana Balboa, una curaduría dedicada al fotógrafo gibareño Nelson Gallardo, recientemente fallecido, y una segunda al proyecto Voces del Audiovisual, de niños que hacen cine. Otro gibareño, William Domingo Leyva, expondrá sus Artefactos de proyección, con los cuales acomete una particular iniciativa comunitaria de proyección de clásicos fílmicos.

Un apreciable grupo de creadores visuales como Ernesto Rancaño, Eduardo Abela, Rafael Pérez Alonso, la propia Diana Balboa, Alicia Leal, Max Delgado y Sandor González también respondieron a la tradicional convocatoria de la decoración de telones, y a la composición de un mural colectivo.

De la Cruz también refirió la gran presencia de obras teatrales para niños, que siempre se presentarán a las diez de la mañana en la Plaza Cultural. Y como ante los recientes azotes de huracanes a comunidades aledañas como El Güirito, varios grupos acudirán para ofrecer su arte. A la nómina escénica festivalesca se unen Teatro Andante, de Bayamo, y de Holguín, el Guiñol, Alasbuenas, Palabras al viento, Trébol Teatro, Rompetacones, y la compañía Codanza de Maricel Godoy. Destacables son la presentación de la obra La cita dirigida por Osvaldo Doimeadiós y el estreno mundial de Humo, del dramaturgo holguinero Yunior García, protagonizada por Félix Beatón y el propio Renecito de La Cruz.

“Este año, el Festival excepcionalmente cambió su fecha para julio”, no dejó de apuntar Perugorría, “y queremos el año que viene regresar a nuestra fecha de abril. Cada vez estamos comprometiéndonos más con el trabajo y la calidad de lo que estamos haciendo. Eso nos ha hecho seguir buscando, seguir armando un equipo de trabajo, una junta directiva. Nos ha hecho ser cada vez más conscientes de la importancia de una estrategia para organizarnos”.

Tomado de: FIC Gibara