Gibara: una película interminable

Fotos: Edgar Ariel y Ernesto Herrera

Luego de dos años de expectativas, finalmente el 12 Festival Internacional del Cine Pobre quedó inaugurado este miércoles en Gibara, Holguín.

Desde las 8:00 p.m. el pueblo y los invitados al evento colmaron la calle principal para el acostumbrado desfile que da inicio a cada edición del Festival. Una versátil banda, que regalaba bien el tema de El padrino, bien los temas de Moré, robaba la atención de los presentes. A la banda la seguían niños con 200 globos, como los años de Gibara. Los caminantes llegaron hasta el parque Calixto García, donde recordaron a Humberto Solás, fundador del evento y su alma, todavía hoy.

Para Yaima Aguilera, gibareña que ha presenciado todos los festivales, el primer desfile ha sido “el más lindo”. Y es que estaba Solás. “Fue muy emocionante. Todo el festival lo es. A la gente de Gibara nos gusta para salir, ver cosas nuevas, ir al cine…”.

Una vez en el parque, todos los gibareños entonaron las notas del himno de la localidad; una habanera, dicen, desde el punto de vista musical. Durante el acto, Jorge Perugorría, presidente del evento, recibió el escudo de Gibara y recordó, una vez más, a Solás.

Durante la inauguración del 12 Festival Internacional del Cine Pobre.

“Humberto fue el fundador de este Festival y será siempre su guía. El evento es como el pueblo que lo acoge: después de los ciclones que lo azotan, se reinventa. Gibara es una película interminable”, declaró Perugorría.

Al finalizar el acto público, y mientras sonaban las campanas de la iglesia, los asistentes se dirigieron hacia el cine Jiba, la sala oscura del pequeño poblado. El filme en concurso La caridad, del mexicano Marcelino Islas, ocupó la gran pantalla durante 109 minutos.

Y luego vino la música. ¿Acaso podía faltar? El conocido cantautor cubano Francisco (Pancho) Céspedes se encargó –incluso bajo la lluvia- de poner al público a cantar, bailar, reír, recordar…, con esa mezcla de alegría y tristeza que encierran sus canciones.

“Deseo homenajear a Humberto (Solás), como debemos hacer y como está haciendo Gibara. De hecho, me parece que todos sentimos la necesidad espiritual de salvar este Festival e impulsarlo, a pesar de los pesares, como diría Serrat”, aseguró Céspedes a la prensa.

El popular cantante no solo aprovechó la gala para rendir honores al director de Lucía. También estuvieron “presentes” grandes de la música como Bola de Nieve, César Portillo de la Luz y Armando Manzanero. Y es que para Pancho, “homenaje es una palabra que uno utiliza para cantar lo que tiene ganas de cantar”.

Ya comenzó, pues, el filme Gibara. Ojalá sus participantes encarnen bien sus roles, tanto protagónicos como secundarios. Solo eso puede garantizar que la película, como expresó el Diego de Fresa y Chocolate, el amigo de Solás, sea eterna.

(21/ 04/ 2016)