La sombra de los árboles en flor

La sombra de los árboles en flor

Vie, 09/16/2016

La sombra del naranjo parte de un hecho que recuerda muchas de las novelas escritas por Gabriel García Márquez. Óscar Naranjo, conocido como Don Óscar, ya no está; en la finca familiar de los Naranjos ya no crecen muchos árboles con sombra.

Esta obra se inserta en la ya larga lista de documentales en los que sus realizadores son protagonistas de una forma u otra. El audiovisual en cuestión indaga sobre la historia de Don Óscar Naranjo, padre de tres hijos y abuelo al menos de seis nietos, incluido el co-director Óscar Herrera Naranjo quien, junto a Patricia Velásquez Guzmán, ganó con este material la quinta edición de DOCTV Latinoamérica.

Don Óscar es un patriarca familiar, reconocido por su propia familia en los testimonios que incluyen nuera, sobrina, hermano, hijas y nietos. Este hombre tuvo una vida para proteger una extensa prole, que decide de conjunto internarlo en una institución especial debido a una enfermedad degenerativa.

Sin cuestionamientos, Herrera Naranjo intenta ilustrar la historia familiar y el porqué de la decisión. Retratando a su familia, el realizador intenta comprender varias situaciones comunes, que él expone como propias de Costa Rica, pero que trascienden el país y se vuelven reconocibles en cualquier otro: la vejez y cómo asumirla, además del tema que transversaliza todo el material, el patriarcado y sus formas de expresión como un sistema naturalizado.

El montaje alterna videos familiares epocales con testimonios de su familia e imágenes del lugar donde residió su abuelo los últimos once años de su vida. Las guías temáticas para los testimoniantes se basan en la relación que tienen con don Óscar, cómo lidiaron con el momento de su enfermedad hasta que deciden internarlo. Con estas ideas emergen los grandes temas mencionados anteriormente: vejez y patriarcado.

Desde la descripción de una vida diaria, de recuerdos, de perspectivas de cada entrevistado se construye un retrato familiar que inevitablemente muestra uno social, y para que no quede dudas hacia la mitad del metraje Herrera Naranjo decide contar también la historia de sus tíos abuelos en una situación similar.

De la historia que cuenta La sombra…  se desprende, además, una relación intrínseca con la memoria como dispositivo de patrimonio, de brújula ante tiempos venideros. A su director la interesa entender tres tipos de pasados para conformar un relato que lo lleve hasta su actualidad, así busca la explicación del pasado que desconoce, que ha visto en fotografías, otro más inmediato que ha conocido, recogido en las cámaras familiares, y otro más cercano, el de su niñez.

Sin llegar a ser una familia garcía-marquiana, pues no se encuentran las excentricidades de los personajes del Gabo, la familia Naranjo tiene también sus rencores, que son expuestos en el material en un cuidadoso tono que no traspasa los temas principales, sino más bien los argumentan.

A la sombra del naranjo que fue Don Óscar han vivido sus hijos, ha estado en casa durante toda una vida su esposa, y cuando el fundador de este nunca mejor llamado tronco familiar desaparece, desde el recuerdo, el cariño y el respeto, su nieto intenta despejar las interrogantes que el amor y la vida cotidiana en ocasiones no cuestionan.

(15-21/ 09/ 2016)